sábado, 2 de junio de 2012

Desafiar la memoria de crisis cíclicas

En la foto de Telam se ve a un grupo de caceroleros pegándole a periodistas. Seguramente esos golpeadores se la pasan hablando de democracia, de diálogo, de consenso, de república y acusando al gobierno por la supuesta ausencia de todo eso. Representan a ciertos sectores que, con los mismos argumentos, una y otra vez desconocían los mandatos populares e iban a golpear las puertas de los cuarteles. Pero convengamos que muchas veces los ayudaron las condiciones económicas generadas por gobiernos que se doblegaban ante las corporaciones y se debilitaban en sus propios programas. Es así, que hoy esos sectores pueden tener cierto eco, más que por sus intenciones destituyentes, por apelar a la memoria colectiva de nuestras cíclicas crisis. Allí se montan las corporaciones devaluacionistas en alianza con grupos concentrados nacionales y multinacionales. Nueve años de crecimiento y de variables macroeconómicas ordenadas asustan a quienes esperan la crisis del décimo año. Las mentiras propagadas por determinados medios anunciando catástrofes, junto a la real crisis internacional y las verdaderas necesidades de divisas del Estado, se articulan con aquella memoria histórica y hacen imprescindible tranquilizarnos y desplegar nuestro mayor poder de convencimiento, profundizar la sintonía fina y demostrar que esta vez el camino será firme hacia adelante.